Cada organización debe garantizar que todos sus datos se almacenen de forma segura y que cualquier posibilidad de fuga de datos o robo de información se minimice tanto como sea posible. Los proveedores de atención médica también deben asegurarse de cumplir con la Ley de Responsabilidad y Portabilidad del Seguro Médico (HIPAA). Estas son algunas de las formas en que las reglas de HIPAA pueden afectar su práctica y los pasos que puede tomar para asegurarse de cumplirlas.
Reglas HIPAA
Los dos componentes fundamentales de HIPAA son la regla de privacidad y la regla de seguridad. Los aspectos clave de la Regla de Privacidad de HIPAA se relacionan con quién puede tener acceso a la información de salud personal (PHI), cómo se usa y divulga. Se deben implementar políticas y procedimientos para garantizar que solo se divulgue la información mínima necesaria y que se obtenga la autorización escrita del paciente antes de divulgar su información. No seguir la regla de privacidad de HIPAA puede dar lugar a sanciones civiles e incluso penales. La regla de seguridad de HIPAA requiere que toda la ePHI que se cree, envíe o reciba se mantenga confidencial, que se mantenga la integridad de los datos y que los datos estén disponibles cuando sea necesario.
Almacenamiento seguro de registros electrónicos
La mayor parte de la información sanitaria de los pacientes ahora se almacena digitalmente, lo que facilita el acceso a los datos clínicos entre proveedores. Sin embargo, estos datos todavía están sujetos a las mismas reglas de HIPAA. Puede incluir información sobre los medicamentos del paciente, su historial médico y su información de facturación. Fundamentalmente, esto significa que todos los registros médicos electrónicos deben almacenarse de forma segura y que deben implementarse medidas de seguridad adecuadas para evitar el acceso inadecuado.
Cifrado adecuado
Es esencial que se establezcan salvaguardias para garantizar que se minimicen las amenazas y violaciones de seguridad.
Una de las salvaguardas más importantes a implementar es el cifrado seguro de datos. Para garantizar la máxima seguridad, es esencial que utilice un software que cifre los datos cuando realice copias de seguridad de sus registros médicos. Lo mismo se aplica a cualquier plataforma que pueda utilizar para transferir información del paciente a otros profesionales de la salud o a los propios pacientes.
Prevención de violaciones de datos
Cada vez que alguien sin autorización accede a información de salud personal, esto se considera una violación de datos. Puede ser un hacker, un miembro del equipo con intenciones maliciosas o simplemente un empleado curioso. Las organizaciones deben tomar medidas para proteger la información del paciente contra el acceso inadecuado, en la medida de lo posible, para evitar violaciones de datos evitables. Siempre que se descubre una violación de datos, es imperativo que la organización proporcione una notificación de violación, como lo especifica la Regla de notificación de violación de HIPAA.
Protección contra ataques cibernéticos
Las organizaciones también deben asegurarse de contar con salvaguardias adecuadas para protegerse contra ransomware y ataques cibernéticos. Los ataques de ransomware implican software malicioso que cifra los datos en una computadora o red y niega el acceso a los datos hasta que se haya realizado el pago del rescate.
Los proveedores de atención médica son particularmente vulnerables al ransomware y los ciberataques. La mayoría de estos ataques tienen como objetivo robar datos electrónicos de atención médica que luego pueden venderse. La mejor estrategia para garantizar que puedas recuperarte de cualquier tipo de ciberataque es tener copias de seguridad fuera de línea. También debe asegurarse de que todos los datos guardados en la nube se almacenen de forma segura. Corre el riesgo de multas, daños a su reputación e incluso malos resultados de atención médica si no cuenta con la seguridad adecuada.
Salvaguardar la salud pública
Si bien siempre se debe respetar la privacidad individual, hay casos en los que la PHI puede divulgarse en masa. Serán casos específicos que impactarán en la seguridad pública. Por ejemplo, cualquier situación que requiera identificar, monitorear y responder a una enfermedad o muerte. Otras situaciones incluyen terrorismo, vigilancia, investigación de brotes e investigación. Es necesario tener claro qué información se puede difundir y utilizar en cada caso.
Conclusión
Para garantizar que usted y sus socios comerciales cumplan con HIPAA y protejan su PHI de manera adecuada y segura, debe minimizar el riesgo de que cualquier información de salud se vea comprometida, divulgada indebidamente o robada y cifrada. Asegúrese de contar con las últimas iniciativas de gestión de seguridad para proteger sus plataformas digitales y garantizar que la información del paciente permanezca segura y sin riesgos.
Beatrix Potter es escritora sobre ciberseguridad en el sitio web de Essay Services .