Dado el creciente volumen y complejidad de los ataques actuales, no sorprende que implementar servicios y bienes de ciberseguridad cueste mucho dinero. Por otro lado, unas medidas de seguridad insuficientes pueden tener repercusiones devastadoras y un impacto sustancial en la reputación y el presupuesto de una empresa a la hora de determinar qué grado de ciberseguridad se requiere. Un enfoque podría ser automatizar la prevención de desastres, lo que ahorraría dinero y eliminaría la posibilidad de error humano. Sin embargo, en la práctica, una ciberdefensa exitosa implica la integración de tecnologías automatizadas y trabajo humano.

La razón fundamental de esto es que el cibercrimen es perpetrado por personas. Los atacantes están continuamente ideando nuevas formas de eludir las medidas de seguridad, inventando e implementando estrategias de ciberataque más sofisticadas y explotando agresivamente las vulnerabilidades de las personas para obtener acceso a la infraestructura de una empresa, como piratear el inicio de sesión de Woo Casino . Debido a que la IA se basa en la experiencia adquirida y adquirida previamente, ni siquiera la inteligencia artificial (IA) más avanzada puede contrarrestar la amplia gama de comportamientos malévolos.

Dicho esto, es fundamental investigar y examinar una variedad de medidas de ciberseguridad que requieren la participación humana.

Detección de amenazas avanzadas

Incluso los sensores mejor calibrados son incapaces de detectar actividad dañina no detectada previamente. Este es el caso porque estos ataques normalmente consisten en una sucesión de actos independientes y válidos que pueden confundirse fácilmente con acciones del administrador del sistema o de un usuario normal.

Esto no quiere decir que la IA no sea capaz de detectar amenazas. De hecho, puede abordar eficazmente el 100 % de los ataques potenciales y, cuando se configura adecuadamente, puede reducir considerablemente la carga de trabajo de los analistas. Se requieren habilidades especiales, experiencia analítica de alto nivel y modificación continua de algoritmos para la estrategia de fuerza conjunta de participación humana combinada con inteligencia artificial.

Evaluaciones de seguridad avanzadas

Las evaluaciones son necesarias para obtener una comprensión integral de la preparación de una empresa en materia de ciberseguridad. Para ello, por ejemplo, las evaluaciones de vulnerabilidad son soluciones automatizadas. Esta herramienta se basa en una base de datos de fallas de seguridad previamente identificadas, pero no puede evaluar la resiliencia del sistema de seguridad frente a ataques sofisticados y comportamientos inusuales del adversario.

Se deben crear técnicas de evaluación más integrales para verificar que la organización es capaz de salvaguardarse a sí misma. Por ejemplo, servicios como las pruebas de penetración y los equipos rojos, que son principalmente manuales y dependen de los conocimientos y la experiencia de un especialista, realmente pueden imitar un ciberataque. Estos métodos emplean una combinación de estrategias, tácticas y procesos que se adaptan a las capacidades ciberdefensivas particulares de la empresa, simulando la actividad real del atacante.

Alerta de seguridad

Si bien los ciberdelincuentes son ingeniosos, el personal defensivo de una organización no puede evitar por completo la capacitación en concientización sobre seguridad. El equipo de ciberseguridad debe estar atento a la relevancia de su educación en seguridad y encontrar formas nuevas e inusuales de comunicar información crítica a sus compañeros de trabajo o subcontratar su capacitación.

Se debe revisar el enfoque de todo o nada de la IA al decidir si se automatizan completamente o no las demandas de ciberseguridad de una organización. Más bien, la respuesta está en algún lugar del centro. La ciberprotección integral solo se puede lograr combinando procesos automatizados con innovación, habilidades y control humanos.