En el mundo digitalizado en el que vivimos hoy, los datos son un componente vital de cualquier sistema sanitario.
Sin embargo, también se está volviendo cada vez más susceptible a las amenazas a la seguridad , particularmente para los sitios web de atención médica que administran un gran volumen de datos confidenciales de pacientes.
Estas amenazas no sólo ponen en peligro la privacidad de los pacientes, sino que también pueden provocar pérdidas financieras, daños a la reputación e incluso perturbar la prestación de servicios de atención.
Violaciones de datos
Las violaciones de datos representan una importante amenaza a la seguridad en la industria de la salud. Las personas no autorizadas pueden obtener acceso a información confidencial almacenada en sitios web, incluidos identificadores personales, historiales médicos, registros de facturación y más.
Estas infracciones plantean riesgos importantes, incluido el robo de identidad, pérdidas financieras y posibles daños a los pacientes si su información de salud se utiliza de forma maliciosa. Las fuentes más comunes de estas infracciones son los ataques de phishing y el uso de credenciales débiles o robadas.
Ataques de phishing
Los ataques de phishing son un método frecuente utilizado por los ciberdelincuentes para ejecutar violaciones de datos. Implican la manipulación del personal sanitario para que revele sus credenciales de inicio de sesión, normalmente a través de correos electrónicos engañosos que se hacen pasar por fuentes fiables.
Los atacantes de phishing pueden pretender ser un contacto conocido, un agente de soporte tecnológico o un superior dentro de la organización, solicitando información confidencial o instando a tomar medidas inmediatas.
Esta manipulación explota la naturaleza humana, convirtiéndola en un vector de ataque excepcionalmente eficaz. A continuación se muestran algunas formas prácticas de combatir estos ataques:
- Implementar autenticación multifactor (MFA): al utilizar múltiples formas de autenticación , como algo que usted sabe (contraseña), algo que tiene (token o tarjeta) o algo que es (datos biométricos), puede reducir significativamente el riesgo de Acceso no autorizado.
- Realice capacitaciones periódicas para el personal: actualice a su personal periódicamente sobre las últimas tácticas de phishing y cómo reconocerlas. Esta capacitación debe incluir ejemplos de correos electrónicos de phishing, consejos para identificar remitentes o contenido de correo electrónico sospechosos y pasos a seguir cuando se sospecha de un intento de phishing.
- Mejore los sistemas de seguridad del correo electrónico: asegúrese de que sus sistemas de seguridad del correo electrónico sean sólidos y estén actualizados. Esto incluye filtros de spam, que deben configurarse para detectar posibles correos electrónicos de phishing, y software de seguridad del correo electrónico, que debe actualizarse con frecuencia para contrarrestar las últimas amenazas.
Credenciales débiles o robadas
Las credenciales débiles o robadas presentan otra vía común para las violaciones de datos. Los empleados pueden crear contraseñas que se pueden adivinar fácilmente, o los ciberdelincuentes pueden obtener credenciales pirateándolas o comprándolas en la web oscura.
En las manos equivocadas, estas credenciales brindan acceso ilimitado a datos confidenciales, lo que permite violaciones masivas de datos. A continuación se explica cómo abordar esta amenaza:
- Aplique una política de contraseñas seguras: implemente una política que requiera complejidad de contraseñas y cambios frecuentes. La política debería exigir el uso de letras mayúsculas y minúsculas, números y caracteres especiales en las contraseñas. Además, las contraseñas deben cambiarse cada 60 a 90 días.
- Promover el uso de administradores de contraseñas: los administradores de contraseñas pueden almacenar contraseñas de forma segura y generar contraseñas aleatorias y de alta seguridad, lo que reduce la posibilidad de que los empleados utilicen contraseñas débiles o duplicadas.
- Supervisar la actividad del usuario: al observar y analizar el comportamiento del usuario, las organizaciones pueden detectar actividades inusuales o sospechosas que puedan indicar una infracción. Esto podría incluir múltiples intentos de inicio de sesión, acceso a datos inusuales o actividades durante horas impares. Tras la detección, la cuenta se puede bloquear y se puede alertar al usuario para que cambie su contraseña.
Al abordar de manera proactiva los ataques de phishing y las credenciales débiles o robadas, las organizaciones de atención médica pueden reducir significativamente su susceptibilidad a las filtraciones de datos.
Ataques de ransomware
Los ataques de ransomware se han convertido en los últimos años en una grave amenaza para los sitios web de atención sanitaria. En estos ataques, los ciberdelincuentes cifran los datos de los sistemas de una organización sanitaria y exigen un rescate por descifrarlos.
Esto puede interrumpir los servicios de atención médica, provocar retrasos en los tratamientos y, en casos extremos, poner en peligro la vida de los pacientes si los sistemas críticos se ven comprometidos. Los ataques de ransomware suelen tener éxito debido a la falta de una infraestructura de ciberseguridad sólida y a errores humanos.
Falta de infraestructura de ciberseguridad
Una infraestructura de ciberseguridad sólida es crucial para defenderse de los ataques de ransomware. Sin embargo, muchos sitios web de atención médica siguen siendo vulnerables debido a una inversión insuficiente en ciberseguridad o a la dependencia de sistemas obsoletos. La buena noticia es que hay medidas que las organizaciones sanitarias pueden tomar para fortalecer su infraestructura de ciberseguridad:
- Actualizaciones periódicas y administración de parches: una de las principales formas de prevenir ataques de ransomware es actualizar y aplicar parches periódicamente a todo el software y los sistemas. Las actualizaciones suelen incluir correcciones de vulnerabilidades conocidas que podrían ser aprovechadas por los ciberdelincuentes.
- Adoptar un marco de ciberseguridad: la implementación de un marco de ciberseguridad bien reconocido, como el marco del NIST (Instituto Nacional de Estándares y Tecnología), puede guiar las prácticas de gestión de riesgos. El marco del NIST proporciona estándares, pautas y mejores prácticas para gestionar los riesgos de ciberseguridad.
- Copia de seguridad de datos: realizar copias de seguridad periódicas de todos los datos es una estrategia defensiva fundamental contra los ataques de ransomware. Si ocurre un ataque, tener una copia de seguridad reciente le permitirá restaurar sus sistemas sin pagar el rescate. Es importante garantizar que las copias de seguridad se almacenen de forma segura, ya sea fuera de línea o en una red separada, para evitar que se cifren durante un ataque.
Error humano
A pesar de los sistemas de seguridad más sofisticados, el error humano sigue siendo una puerta de entrada común para los ataques de ransomware.
Esto incluye comportamientos como hacer clic en un enlace malicioso, descargar un archivo infectado o incluso dar acceso involuntariamente a la red a los ciberdelincuentes.
La clave para mitigar estos riesgos es a través de la educación, las pruebas y la preparación:
- Capacitación en ciberseguridad: implementar un programa integral de capacitación en ciberseguridad para todos los miembros del personal es crucial. Esto debería incluir información sobre cómo identificar y evitar posibles amenazas de ransomware, como correos electrónicos sospechosos o sitios web que no son de confianza.
- Pruebas periódicas de ciberseguridad: probar periódicamente el conocimiento del personal sobre las prácticas de ciberseguridad mediante simulaciones puede reforzar la capacitación. Las simulaciones de phishing, en particular, pueden ayudar a identificar áreas donde podría ser necesaria capacitación adicional.
- Plan de respuesta a incidentes: la creación de un plan exhaustivo de respuesta a incidentes es otro componente clave en la preparación para posibles ataques de ransomware. El plan debe describir los pasos a seguir en caso de un ataque, incluido cómo aislar los sistemas afectados, a quién notificar y cómo comenzar el proceso de recuperación.
Los ataques de ransomware representan una amenaza significativa para los sitios web de atención médica, pero las medidas proactivas que involucran una infraestructura de ciberseguridad mejorada y capacitación del personal pueden mitigar significativamente los riesgos. Estas estrategias garantizan que los proveedores de atención médica puedan mantener la confianza de los pacientes y continuar brindando servicios cruciales incluso frente a las crecientes amenazas cibernéticas.
Documentación clínica mal gestionada
La documentación clínica mal gestionada puede generar una variedad de amenazas a la seguridad, incluidas violaciones de datos y fraude. Una adecuada gestión de la documentación clínica es fundamental para optimizar los reembolsos , ya que garantiza un registro preciso y completo de la atención al paciente, que las compañías aseguradoras exigen para el pago.
Documentación inexacta o incompleta
La documentación clínica inexacta o incompleta puede provocar denegaciones de reclamaciones, pagos insuficientes y auditorías. Para evitar esto:
- Implementar un programa de mejora de la documentación clínica (CDI) para garantizar que la documentación sea precisa, completa y refleje la atención brindada.
- Audite periódicamente la documentación para detectar inconsistencias o inexactitudes.
- Capacite a los médicos sobre las prácticas de documentación adecuadas y las implicaciones de una documentación incompleta o inexacta.
Transmisión o almacenamiento inseguro de documentación
La transmisión o el almacenamiento inseguro de documentación clínica pueden exponer los datos confidenciales del paciente a un acceso no autorizado. Para protegerse contra esto:
- Utilice cifrado para todas las transmisiones de datos.
- Almacene datos en servidores seguros con controles de acceso implementados.
- Pruebe periódicamente los sistemas de seguridad en busca de vulnerabilidades.
Nota final
En el mundo de la atención sanitaria, la seguridad de los datos es primordial. Desde violaciones de datos y ataques de ransomware hasta documentación clínica mal administrada, los sitios web de atención médica enfrentan una variedad de amenazas que podrían poner en peligro la privacidad de los pacientes y la salud financiera de los proveedores de atención médica.
Para protegerse contra estas amenazas, es vital invertir en una infraestructura sólida de ciberseguridad, implementar protocolos de seguridad rigurosos, capacitar al personal periódicamente sobre las mejores prácticas y garantizar que la documentación clínica sea precisa y segura.
Al hacerlo, las organizaciones de atención médica pueden proteger los datos vitales que poseen y al mismo tiempo garantizar que puedan brindar atención ininterrumpida y de alta calidad.